Sweet Tooth – MelkorMancin

Se le llama Lollipop, ella les diría que su beso era más dulce que la manzana, cuando hacía su baile rockero nadie podía resistirse. La mujer imaginaba chupando un dulce Lollipop en su boca, metiéndolo y sacándolo de su garganta, mientras ella se masturbaba con sus dedos.

De pronto, otro Lollipop es insertado en su vagina, llenándola en su vagina, hasta que este se transforma en un chorreante miembro en el que salta. Este sueño erótico es interrumpido por la alarma de su teléfono. Janice quedó caliente e intentó que Phil, su esposo, le diera el placer que necesitaba, pero este la rechazó.

Para su suerte, una foto polla llega a su teléfono de su amante. Ella tenía una idea para poder obtener el placer lujurioso que tanto necesitaba. A la mañana siguiente, el suegro de Janice recibe a Sam, un amigo afroamericano del trabajo, que fue invitado para un día de diversión.

Por desgracia, Phil tenía que atender unos asuntos laborales, así que solo quedaron el padre de Phil, Donald, Sam y Janice para comer. La velada iba bien, hasta que llegaron a tomar el vino, y Donald empezó a preguntarle a su amigo que opinaba sobre su nuera, ¿no creía que tenía un cuerpo perfecto? ¿No tenía ella grandes tetas o un dulce olor a almíbar?

Obviamente, Sam intentó ignorar esto, pero cuando vió como Donald sacó el top de su nuera para empezar a agarrar sus tetas, no pudo soportarlo más. Sabía lo que ellos querían, así que procedió a acercarse para chupar las tetas de Janice, golpeando sus pezones rosas con su lengua mientras el anciano Donald seguía apretando sus senos.

Los dos hombres estaban calientes como Janice tanto quería, así que se puso de rodillas para que sacaran sus duros miembros y empezó a chuparlos. Ella tenía la vainilla y el chocolate en su cara, y estaba encantada pasando sus lenguas por ambos, disfrutando llenar sus pollas con su saliva, mientras ella misma se mojaba.

Donald y Sam siguieron follando su boca, golpeando sus tetas y su cara con sus pollas, y frotando sobre ella. Cuando se corrieron, Janice gustosamente se trago todo su semén tibio. Pero ese no era el final, porque la mujer se bajó los pantalones para que Sam pudiera disfrutar ahora de su vagina.

El caliente sabor de su coño fue suficiente para que la polla de Sam se pusiera dura de nuevo como una roca. Estaba encantado de darle un oral, mientras ella pajeaba a su anciano suegro. Parecía que iban a subir al siguiente nivel, cuando oyeron la puerta de entrada abrirse.

Phil había vuelto y no parecía feliz. Su reunión fue un asco, y ahora se quejaba con su esposa y su padre porque se bebieron su whisky caro. Por suerte, los amantes pudieron arreglarse para disimular lo que pasaba, aunque no impidió que Sam se ocultara para seguir saboreando el coño de Janice, quien llano su cara con sus líquidos.

Después de que Phil subió las escaleras, Sam pudo cumplir la fantasía que tenía, tener a Janice bajo de él, con sus piernas abiertas, lista para ser follada. Aunque un remordimiento de consciencia lo hizo dudar, la propia Janice le empezó a rogar que la follará con fuerza.

Janice era la esposa perfecta, y ahora estaba teniendo una polla oscura destruyendo su coño y la polla de su anciano suegro en su boca para saborearla. Tenía sus dos Lollipops para disfrutar hasta que la llenaron con su semén. Mientras, Phil se encontraba en un armario masturbándose con la ropa interior de su esposa.

Cuando Donald subió a hablar con su hijo, Sam tuvo que alistarse para irse, pero Janice siguió provocando, usando sus pantalones y mostrándole su gran culo. Sam tenía una nueva erección y Janice quiso encargarse de él, así que empezó a darle una mamada, ahora estaban sólo ellos dos, follando en el sofá.

Eso hasta que Donald volvió, sin pantalón para follar también la vagina de su nuera. Ya no había necesidad de contenerse, según el anciano podían hacer todo el ruido que quisieran, y pudieron seguir follando a la mujer hasta que acabaron en su interior, un sexo que nunca olvidaría.

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