Silvia ha conocido a un chico por tinder y han quedado para conocerse en el club Dandy Demons. Él está nervioso, ya que nunca antes había hecho algo así, pero le entusiasma conocerla. Una vez en el club, ella logra que le hagan pasar rápidamente. Inmediatamente surge una atracción mutua, especialmente por parte de él que no puede evitar comérsela con la mirada.

Ella pilla su creciente erección de inmediato, y se siente intrigada por lo grande que debe ser su polla. Silvia ha estudiado anteriormente a los de su clase; un diablo con un solo cuerno, es señal de madurez y liderazgo. Dos cualidades que a ella le encantan, además de su curiosidad por lo bien dotado que debe estar.

Ambos se ponen muy cachondos de repente, por lo que deciden irse a un lugar más privado. Acaban en un cuartico de almacén muy pequeño, él está nervioso por lo apretados que están en el lugar, pero a ella le gusta estar así de cerca. Silvia le pide que abra su boca, y aunque en un principio se resiste, él acaba haciéndolo timidamente.

En ese momento ella confirma que él es un híbrido de diablo y un sin rostro, lo cual asegura que su polla será más enorme de lo que ella pensaba. Cuando él se la saca, Silvia queda completamente enamorada de lo alucinante que es. A pesar de que él es un poco inseguro de poder gustarle, Silvia está deseosa por probarlo.

Ella comienza pasando su lengua ligeramente y depositando pequeños besos. Él está muy nervioso, nunca había estado en esa posición y no está seguro de si le va a doler. Pero en cuanto Silvia empieza a meterse su polla en la boca, sus dudas se van por completo; confirma que se siente muy bien que se la chupen.

Silvia se la chupa tan rico que en cuestión de unos pocos minutos él se corre en su boca. Ella se traga un poco de su leche, pero incluso después de sacársela de la boca, su polla sigue botando semen. Su polla seguía dura y lista para más, ya ella había escuchado que los diablos tenían mucho aguante.

Definitivamente ella quiere más, e irá por ello. Silvia está lista para la siguiente ronda también, y no se perdería la oportunidad de montarlo. Él está nervioso, pero deseoso de probar más de ella.