Un día, Jenny se acercó a Fairy Tail para cumplir la apuesta que había hecho con Mirajane en el anterior torneo. Jenny había sido completamente derrotada, por lo que ahora debía cumplir con los deseos de una de las magas más poderosas de Fairy Tale.

Jenny se sorprendió al ver que Mirajane la recordaba, después de todo había pasado mucho tiempo desde el torneo. Aunque para Mirajane recordarla era algo natural, ya que veía su cara a diario en el enorme póster colgado en la pared del bar. Ahí se podía apreciar un desnudo completo de Jenny, puesto en exhibición para que todos pudiesen contemplar su figura, luego de haber sido derrotada.

Aunque estaba completamente humillada, era una mujer de palabra, por lo que estaba dispuesta a cumplir con su parte del trato. La mujer le pidió una habitación para poder pasar la noche, a lo que Mirajane respondió que podía quedarse con ella, ya que sus hermanos habían asistido a un trabajo, por lo que no iban a llegar.

Ya en su habitación, Mira dijo que se alegraba de que ella aceptara quedarse, a lo que Jenny respondió diciendo que solo necesitaba un lugar en donde pasar la noche. Pero eso no era todo lo que Mirajane tenía que decir. Le agradeció por haber sido una inspiración para convertirse en modelo siete años atrás. La mujer le dio un cálido beso a su amiga, a lo cual Jenny se quedó completamente perpleja.

Luego de aclarar sus ideas, Jenny le dijo que,si quería agradecérselo, debía hacerlo apropiadamente. Acto seguido, ambas magas se quitaron la ropa y comenzaron a besarse apasionadamente. No tardaron mucho en comenzar con los juegos previos, en donde Mirajane empezó a lamer los pezones de su amiga. Mirajane parecía tener mucha experiencia, mientras hacía que su amiga disfrutara de una gran excitación.

Habiendo entrado en calor, Mirajane comenzó a jugar con el coño de su amiga, que ya estaba húmedo de tanta estimulación. Empezó frotándolo suavemente, acariciando su clítoris y metiendo sus dedos delicadamente dentro.

La chica no tardó en hacerle un oral, metiendo su lengua hasta lo más profundo del coño de la rubia, acariciando suavemente con su lengua toda la parte interna y externa de su vagina. Luego de ser lengüeteada por su amiga con gran habilidad durante un rato, Jenny estaba lista para dar el siguiente paso.

Pronto comenzaron a frotar sus coños rápidamente entre sí, con tanta fuerza que no tardaron demasiado en correrse. Una vez acabaron, Jenny le dijo a Mirajane que era una forma increíble de dar las gracias, había quedado fascinada por las habilidades de su amiga. También le preguntó cuándo se suponía que debían volver sus hermanos, los cuales habían llegado más temprano y habían escuchado todo el espectáculo en la puerta sin decir ni una sola palabra.