Lisa y Bart bajan al sótano de su antigua casa en busca de los recuerdos más preciados de su infancia. Allí abajo se encuentran con una caja repleta de cosas aparentemente secretas. El simple hecho de que sea clasificada como secreta despierta toda la curiosidad de los hermanos y deciden revisarla. Dentro de ella encuentran un casete, y ninguno se resiste a la curiosidad de ojearlo un poco.

Suben hasta su sala e introducen el casete en su viejo televisor. Se sientan en el sofá expectantes con lo que se van a encontrar en la grabación, y en cuanto empieza el vídeo se encuentran con una serie de grabaciones que los pone muy cachondos. En la primera cinta aparece su madre completamente desnuda, mientras su padre la contempla para después comenzar a empotrarla.

Homero folla fuertemente a Marge mientras la tiene en cuatro. Luego aparecen ambos follando en el baño, con su padre levantando a su madre y follándola bajo la ducha. Incluso follan en el sótano, donde Homero la empotra fuertemente. El último clip los muestra follando en la mesa de la cocina, donde muchas veces todos desayunaron en familia.

Para ellos es inevitable excitarse viendo a sus padres follar tan fuerte en cada rincón de su casa, así que con la calentura latente empiezan a masturbarse juntos. De pronto Lisa le sugiere a Bart que deberían desnudarse para mayor comodidad, y él acepta encantado. Ambos se dan una mirada cómplice y deciden comenzar a darse placer mutuamente. Lisa agarra la polla de su hermano para masturbarlo un poco, esforzándose por darle el placer máximo.

Cuando está por llevarse su polla a la boca para probar su sabor, justamente su madre abre la puerta anunciando su llegada a la casa. Marge entra con las compras para prepararle una cena de bienvenida a sus dos hijos. Ellos rápidamente se visten y se levantan del sofá intentando disimular lo que estaban haciendo. Ambos tienen una apariencia extremadamente angelical que casi delata que estaban haciendo algo indebido, pero por suerte su madre no se da cuenta de lo que ocurre. Después de que Marge finalmente entra a la cocina, Lisa aprovecha para decirle a su hermano al oído que lo que han empezado no ha terminado allí.

Están decididos a continuar lo que han iniciado y definitivamente llegarían hasta el final sin importarles las consecuencias. Por eso a las tres de la madrugada Bart se escabulle hasta la habitación de Lisa, que se ha impacientando mientras esperaba a su hermano y ya ha comenzado a tocarse. Él entra a su habitación e inmediatamente se desnuda al ver cómo ella deja al descubierto sus grandes pechos. Por fin ella puede probar su polla, así que ansiosamente se la lleva a la boca y se la chupa hasta sentirla en el fondo de su garganta.

Después Bart decide complacerla a ella, acariciando cada rincón de su cuerpo; jugueteando un poco con sus firmes pechos para luego bajar hasta su cuño. Por eso hunde su cara en su vagina y se la come ágilmente, sediento por probar hasta el último jugo que derrama. Lisa está muy cachonda por lo bueno que es su hermano para el sexo oral, así que ya no quiere esperar más a sentir su polla taladrando su estrecho coño.

Bart ya no es un chiquillo que no hace más que molestar a su hermana, por lo contrario ahora es un hombre que no quiere más que complacerla. Y por ello no espera más y empieza a penetrarla tal y como ella quiere que lo haga. Ambos follan en distintas posiciones, para sentir cómo sus cuerpos se conectan y se mojan en perfecta sintonía. Lisa tiene un coño muy apretado, y a Bart le gusta sentir cómo abraza cálidamente su polla. No se detienen hasta llegar al orgasmo juntos.

Lisa siente cómo su coño es llenado completamente de leche y en definitiva quiere más del líquido de su hermano. Por eso en cuanto se repone no pierde el tiempo en arrodillarse frente a la polla de Bart, hambrienta por comérsela toda. Usa su boca y su lengua para saborearla y suma sus tetas para darle mayor placer. Su hermano no resiste tanta estimulación y termina corriéndose hasta llenarle toda su carita de semen.

Después de esa exhaustiva sesión de sexo, Lisa aprovecha para ir a darse una ducha caliente y sacarse todo el semen de su cuerpo. Pero justo en ese momento su hermano irrumpe y le clava la polla sin previo aviso. Comienza a follarle el culo hasta llevarla a su habitación y empotrarla en distintas posibilidades.

A ella le encanta sentir su culo siendo llenado de leche por Bart, y por eso no se cansa de tenerlo follándola toda la noche. Ninguno de los dos se imaginan que Marge los ha escuchado todo este tiempo. Y más que molestarle, le ha excitado bastante la situación.