Lisa acostumbra vestir vestidos cortos para ir a clases, lo que no se esperaba era que su culo captara la atención del bravucón. Él comenzó a agarrarle el culo y bajar sus bragas, ella estaba incómoda porque no se lo esperaba. Pero su coño sí que se había mojado con solo sentir sus manos.

El bravucón no se quedará tranquilo, ya tiene la polla dura así que lo mínimo que hará será follarla. Para animarla, comienza a lamer su coño y así probar sus deliciosos fluidos. Lisa estaba comenzando a disfrutarlo, pero justamente llega su madre y los pilla.

Para zafarse, Lisa le dice que ese es el bravucón que la ha estado molestando antes. Marge, molesta, le dice que vaya a clases que ella se encargará. El chico está asustado, pues no sabe de lo que es capaz de hacer una madre enojada. Pero se sorprende un montón cuando se da cuenta que Marge no está precisamente enojada, sino muy cachonda.

Marge le propone que deje en paz a Lisa a cambio de estar con ella, el chico por supuesto que acepta encantado. Ella le muestra su vagina madura, y él queda fascinado ante lo húmeda que es. El bravucón comienza a lamer el coño de Marge y después a meter sus dedos; jamás pensó poder tocar a una milf tan rica.

Pronto se acerca el director Seymour hablando con alguien más, así que el chico se esconde bajo el vestido de Marge. Aprovecha la posición para seguir comiéndole el coño. El chico tiene la polla dura como una roca, pero Marge no quiere arriesgarse a que los pillen. Por lo tanto, lo invita a su casa para el siguiente día.

Al día siguiente, ella se prepara con un vestido de Lisa para recibir al bravucón. Cuando él llega, deciden no perder el tiempo y retomar donde lo dejaron el día anterior. El chico lame con sus enormes pechos y juega con ellos.

Marge está tan cachonda que no puede evitar sentir ganas de comerse la polla del chico. Comienza chupándosela hasta el fondo, saboreando su gran polla negra. Cuando ya está lo suficientemente húmeda para entrar con facilidad, ella se sienta sobre su pene y comienza a saltar hasta sentirlo hasta el fondo.

Luego de llegar al orgasmo, Marge quiere seguir sintiendo la polla del chico. Cambian de posición con él arriba. El chico la empotra fuertemente a Marge hasta que finalmente se corre adentro de su coño. Y ella quiere sentirlo más veces calentando su coñito.