Hinata no había tenido la mejor suerte con Naruto. Pasaban tiempo juntos, se querían y besaban, pero cuando iban a tener sexo por al vergüenza siempre lo evitaba. El problema parecía ser ella, pues muchas veces encontró a Naruto masturbándose con revistas en el baño.

La chica estaba perdida, así que Ino decidió que la ayudaría para hacer que Naruto la cogiera como un salvaje. Lo primero era presentarse a sus citas con escotados vestidos que exponían sus grandes senos y sus gruesos muslos. Luego, ella le mostró toda una línea de lencería que usaría para su amado esa noche.

El plan era perfecto, lo único que Ino no mencionó es que ella estaría con Hinata, esperando a Naruto en su cama. Cuando el rubio llegó, las dos se lanzaron sobre él, Ino se sentó sobre su cara, mientras Hinata cargaba su gran polla y chupaba los senos de su amiga.

Después fue el turno de Ino de poder ser follada mientras chupaba el coño de Hinata. Estuvieron juntos durante horas, Naruto usó sus clones para follar el coño, culo y la boca de Ino al mismo tiempo, mientras el verdadero él podía tener un sexo más apasionado con su novia.

Esa fue una noche perfecta de pasión, pero, ¿a quién quería enamorar Ino en verdad? Pues, desde que se reunió con Hinata, ella estuvo teniendo sexo con ella, poniéndola a chupar su coño y disfrutando de sus enormes senos pesados, e incluso seguían besándose a la mañana mientras Naruto dormía. Sea como sea, era evidente que su plan fue un éxito.