ReyComiX » Comics Porno » Extra Thicc – Samurai Jack
Han pasado 50 años. Jack había perdido al amor de su vida, Ashi, estaba solo y con el arma ardiendo de excitación. La mastubarción había perdido cualquier efecto en él, y él sólo deseaba poder acabar con el maldito Aku para poder tener entre sus manos el firme trasero de su amada.
Finalmente, Jack llegó hasta la torre de Aku, donde veía como este era enfrentado por los gigantes del bien. Así que el recorrido el sitio hasta encontrar a su amada. Ashi estaba totalmente desnuda, con las sombras azotándola y manteniéndola cautiva.
Su amada sufría, y Jack quería poder volver a sentir su trasero. Le pedía que luchara, pero ella sufría. Las sombras seguían apretando sus tetas, se metían dentro de su vagina y su boca hasta que su cuerpo quedó consumido por la maldad en su forma más demoníaca.
En la desesperación, Jack le grita a Ashi lo mucho que la amaba. Algo que sirve de invocación a los dioses antiguos que le dan el poder de salvar ese trasero sagrado. Al ver la inconsciencia del Samurai, Ashi empieza a recorrer su cuerpo, murmurando sus planes de acabar con su padre para convertirse en la nueva emperatriz del mal junto a Jack. Los dos amantes que reinaran el universo.
Sin embargo, Jack no estaba tentado por la oferta. En un resplandor de luz, el guerrero exponía su larga y dura polla, era su espada sagrada con la que liberaría a Ashi.
La mujer demonio era incapaz de soportar el poder de la luz, por lo que intenta emprender su huida, pero el la frena. El samurai la tomo del trasero, finalmente tenía su tesoro entre sus manos e iba proceder a limpiarte toda su oscuridad desde el interior.
El hombre empezó a comerle el coño a su amante, saboreando sus líquidos, y Ashi, comenzó a transformarse de nuevo en humano. Sin embargo, su parte demonio no caería tan fácil. Si el samurai quería su trasero, se lo daría, así que de una salta sobre su polla, frotando sus intimidades entre sí para hacerla suya.
El acepta el reto, y comienza a penetrarla con su inmenso miembro, cogiéndola con fuerza mientras ella envolvía su cola a su alrededor para profundizar las embestidas. Ashi estaba bastante encantada con el placer que la envolvía, aunque estaba triste de que Jack siguiera con una expresión apacible, como si ya no la deseara.
Ese fue el punto de ruptura del demonio, ya que mientras se corría, la oscuridad abandonaba su cuerpo. Cómo conoció a Jack, la manera en que él la cuidó, y el amor que le tenían, esos recuerdos inundaban a Ashi.
En un haz de luz, la mujer queda libre de todo mal, finalmente es libre. Aku veía aquel poder liberarse de su torre, y de este salían su hija y el odiado samurai, ambos tenían el poder absoluto y con su poder en conjunto iban a acabar con su vida y su reinado del mal. Ese día, el mundo fue puesto en libertad.