La chica pelirroja lleva todo el día en la playa pero no ha logrado vender nada, víctima del aburrimiento y la preocupacion se le ocurre la idea de ofrecer su cuerpo como un bonus a todos los que le compren. Empieza a desvestirse para atraer clientela y funciona perfectamente, muchos se acercan empiezan a follarsela, se descargan sobre ella y logra vender cada vez más.

Pero la pelirroja quiere más, y reta a los chicos que están interesados en ella a dar el siguiente, se pone en la playa y deja su culo al aire, incitándolos a que se acerquen, todos la mira extasiados, y se dejan llevar por la perfección de ese culo tan perfecto que tiene, para atraerlos aún más, se sube el pantalón y los llama, se pone en una posición provocativa, y finalmente uno de ellos se atreve, se lanza sobre ella y la penetra directamente.

La pelirroja disfruta de cada embestida y el sujeto se deleita por su apretada vagina, los dos se dejan llevar por la lujuria, el sujeto la penetra, la embiste, y la cambia de posiciones para llegar cada vez más profundo en ella. Cuándo está a punto de llegar la pelirroja le pide que se corra dentro de ella. Cuándo acaba la chica le dice que muchas gracias por todo y le dice el precio por todo, el sujeto extasiado dice que valió la pena cada centavo.