Mama Fun Time – Aarokira

Se oyen los gemidos altos de una mujer en las profundidades de una habitación. Eran de una madre que gemía como loca mientras sus pechos rebotaban ante cada penetración. La mujer siempre tenía ese sueño sexual que la calentaba, el mismo patrón, la misma duración, le gustaban. Aunque no entendía, ¿por qué siempre era su hijo con quien fantaseaba?

Al día siguiente, ella admite que algo debe estar muy mal en ella para tener tales pensamientos sobre su hijo. Aún así, no puede evitar calentarse al recordar la manera en que la dominaban en esos encuentros.

Al final, aleja esos pensamientos para despedir a sus dos hijos, Tooru-Kun y Mitsu-Chan, que se van al colegio. Su hijo menor le dice que le dejó preparado el desayuno, ya que se levantó tarde, lo que hace que la mujer no pueda más que enorgullecerse por su niño.

De nuevo es de noche, y la madre siente un gran placer en su intimidad. No podía ver nada, ni podía moverse. Esta vez, sabía que no era un sueño y alguien la estaba cogiendo.

Esta madre estaba amordazada y maniatada, y pedía explicaciones a esa figura que ahora le estaba levantando sus piernas comerle el chocho. Ante tales gritos, la persona le quita la venda para revelar que no era otra que Mitsu-Chan, quien estaba cogiéndose a su madre.

La mujer madura le pide explicaciones, pero Mitsu-Chan le recrimina por su actitud grosera, dado que las paredes de su vagina no hacía más que apretar sus dedos mientras la masturbaba. La mujer estaba, literalmente, de manos atadas, así que no pudo resistirse a la lengua de su hija que introdujo a su boca mientras la besaba.

Esa era una actitud inmoral, pero ella no quería detenerse. La joven levantó a su madre para frotar sus coños entre sí, uniendo sus fluidos, rozándose hasta que finalmente la madre terminó corriéndose.

Luego de esto, desata a su madre para manosear las grandes tetas de sus madres. La expresión triste de la mujer madura sigue sin cambiar, así que el se burla diciendo que seguro pensaba en su hermano menor. Ella, por supuesto, intenta negarlo, pero se queda en shock cuando ve a Tooru-Kun parado en la puerta, totalmente desnudo y con su pene erecto.

Al final, todos esos sueños donde él la follaba en las noches, eran auténticas sesiones sexuales que ambos tenían, y la madre no sabía. Mitsu-Chan procede a darle una mamada a su hermanito en frente de la madre, y ella la aleja regañándolos por ser hermanos.

No obstante, Tooru-Kun aprovecha esto para meter salvajemente su polla a la boca de su hermana y hacer que la chupe mientras la toma de la cabeza. Mitsu-Chan comenta que a su madre parecía gustarle la polla del chico tanto como ella, masturbándose mientras veía la escena.

Finalmente, su hijo termina corriéndose dentro de la garganta de la mujer. La madre se ahoga con el semen de su hijo, y ese momento donde se tiró al piso, el aprovechó para ponerse a sus espaldas y penetrar a su mamá de un golpe.

El continúa jugueteando con su coño, viendo a su familia folla, confesando que su hermano era tan agresivo porque antes le dio un afrodisíaco. Con esta información, la mujer deja que su hijo siga follandola, poniéndola de frente para que la bese, esperando que con eso se vaya su deber como madre.