Después del concierto, un fanboy se acercó a Mika para confesarle su amor. Normalmente, ella rechazaba a estos chicos, pero ese día se sentía especialmente caliente, así que lo dejó entrar a su camerino para cumplirle su fantasía. Se puso de rodillas y sacó la polla del chico para darle una mamada.

El joven empezó a gemir con sorpresa, pero Mika lo relajó, indicándole que dejará que su “oneesan” se encargará. Dicho eso, la rubia siguió chupando con fuerza hasta lograr que se corriera en su boca al poco tiempo, disfrutando del sabor del semén que llevaba tanto sin tomar.

Ella estaba algo decepcionada, pero igual se levantó para dejar que el chico al que le quito su virginidad se fuera. Lo que Mika no esperaba es que el chico la empujará y le rompiera su ropa, ya que quería que le enseñara todo sobre el sexo.

Sin que Mika se lo permitiera, su fan empezó a follarla con su pene que se hacía más grande en su interior, logrando tocar su útero, y golpeándolo con fuerza en cada penetración. Mika gemía como loca, y su fan solo chupaba su lengua, aprovechando para disfrutar al máximo de su cuerpo caliente.

Finalmente, el joven se terminó corriendo en su interior. Mika estaba preocupada por quedar embarazada, pero igual no podía evitar gemir de placer. Incluso se montó sobre el chico para seguir cabalgando su polla como una perra en celo. Ahora era la amante del joven, que incluso siendo inexperto logró dominarla.

Paralelamente, Yukiho, otra idol, se presentó con su lencería transparente ante su manager. Un hombre viejo que no dudo en coger su vagina, sin usar protección, para poder sentir como sus paredes calientes se enrollaban sobre su polla desnuda y como llenaba su interior con su semilla.

Ese era el verdadero mundo de los idols, y Yukiho estaba encantada de complacer al hombre que le dio todo, dejando que su esperma saliera de su interior con felicidad. Incluso le prometió que la siguiente vez traería a sus amigas consigo para que todos pudieran divertirse.