Papakatsu Pacorine!

Pacorine se encontraba preparando su casa para la fiesta de cumpleaños para su amado Yuuki. Este último no tenía idea de los problemas financieros de Pacorine y de lo que tenía que hacer para ganarse la vida. Con el fin de pagar sus deudas, la chica acudió al gremio, a través del cual conoció a un hombre de mediana edad dispuesto a ofrecerle encargos.

El gremio le aseguró que no habría contacto físico. Solo tenía que comer y hablar con el tipo, como recompensa por pasar tiempo juntos. Debido a los problemas económicos del gremio, ella comenzó a realizar otro tipo de encargos en secreto. El hombre estaba dispuesto a desembolsar una buena suma a cambio de favores sexuales.

Esa misma tarde, como de costumbre, había contactado al hombre para ganar algo de dinero y organizar la fiesta de Yuuki. Ya en la habitación, la mujer comenzó a chupársela al hombre mostrando sus delicados y precisos movimientos de lengua, succionando la punta y recorriendo el pene de lado a lado.

El hombre tenía ganas de aprovechar las enormes tetas de Pacorine, por lo que metió su pene entre ellas. Eran tan suaves que se sentía como si se la estuviera follando sin protección. No podía dejar de menear sus caderas, mientras las gigantes tetas de Pacorine arropaban su polla.

Finalmente, este se dejó salir su semen, cubriendo su cara del viscoso líquido blanco. Ella también se corrió por tanta estimulación, dejando la cama empapada de sus fluidos vaginales. El hombre le ordenó que limpiara su polla con la boca hasta dejarla reluciente y lista para su coño.

Al ver lo mojada que estaba, se dio cuenta de lo mucho que ansiaba su pene dentro. Tenía un cuerpo muy atrevido para ser tan joven. Finalmente, el hombre empujó su pene hasta el fondo de Pacorine hasta casi partirla en dos. Sus feroces embestidas hacían que sus lascivos pechos se menearan de un lado a otro.

Su polla había recorrido todo el coño de Pacorine hasta llegar a la habitación del bebé, besan besando su útero con la punta del pene. Mientras ella devoraba su pene por completo, él jugaba con sus pezones, los cuales estaban duros como roca.

Ella estaba tan excitada que se corrió, haciendo que su coño se aferrara aún más a la polla del hombre. Este dijo que, ya que ella lo había contactado, estaba bien correrse dentro. Ante la negativa de Pacorine, él comenzó a tocar la puerta de la habitación del bebe con la punta de su pene, preguntando si estaba disponible para recibir a su bebé.

Al no oír respuesta, el hombre la colocó en posición de perrito para abrir la puerta a la fuerza. En esta posición, su polla penetró su útero. El placer que sentía Pacorine hacía que su mente se pusiera en blanco. Incluso había comenzado a mover sus caderas por su cuenta.

El hombre estaba a punto de correrse dentro de ella. Esperaba que con eso pudiera olvidarse de su novio. Ella suplicó que no lo hiciera. Si llenaba su útero de su espeso semen de seguro tendría su bebé. El hombre penetró lo más profundo de su útero, con toda su fuerza, dejando salir una gran carga de semen dentro. No parecía que la relación entre estos dos iba a acabar pronto

Sé el primero en valora este Comics.

Promedio: 0 / 5. Votos: 0

Categorías