“Acuéstate al lado de la piscina”, eso era lo que le pedían a la hermosa Alya-Chan, rubia de grandes tetas, que estaba en su sesión de fotos. Mientras ella trabajaba, su hermana estaba siendo penetrada por su manager en la esquina.

Pero justo cuando estaba por llegar a su clímax, el personal empezó a llamar a Liera-San para trabajar en la sesión. El manager tuvo que correrse rápido en el estrecho coño de la rubia, pero no le dio tiempo a ella de tener su orgasmo.

Entonces fue el turno ahora de Alya-Chan de ir con el manager para que el hombre la follara también, golpeándola profundo mientras sus inmensos pechos rebotaban. La rubia se burla del hombre, no podía dejarlo solo un segundo, porque ya iba con su hermana para coger.

Cuando Liera-San los encontró, ella quiso unirse, ya que seguía caliente, así que el manager tuvo que llevarlas a su hotel para follarlas a ambas hasta dejar lleno de semen sus estrechos coños.

Las chicas amaban a su manager, y harían todo, incluso compartirlo, para estar con él. Por lo que mientras ambas le hacen un oral al hombre, acuerdan que seguirán cogiendo toda la noche hasta su siguiente sesión de fotos.

El hombre se rinde ante ellas, admite que dejará que las hermanas pasionales hicieran lo que quisieran con él, mientras ambas comparten su pene y se besan sobre él.