ReyComiX » Comics Porno » Weaving Fluids 1 – Tracy Scops
En la Tierra-65, Spider-Gwen tuvo que negociar con Matt Murdock, mientras esperaba, ella le hacía una mamada a cambio de obtener la información que quería. Después de que el mafioso se corriera en su boca, ella vuelve con su aliado, afirmando que ya sabía donde estaba su papá.
Miles admite que en su mundo, Matt era un héroe, y estaba intrigado por el cambio de roles aquí. Cuando están en el departamento, y nota como Gwen se empieza a desnudar para cambiar, las ideas lo abandonan. Por cortesía, el chico quería evitar verla, pero le era imposible y la rubia fue capaz de ver el inmenso bulto de Miles, cuyo tamaño y grosor parecían ser igual al de su antebrazo.
Los dos van a la ubicación, juntos como si fueran pareja, y descubren que era un sitio de Swingers. Miles se muestra abrumado, pero Gwen disimula y lo hace desvestirse para entrar.
En el sitio encuentran a un montón de personas teniendo sexo, incluso un hombre que podía disfrutar de dos chicas, rebotando sobre su polla y apretando sus senos, lo que le hace tener una gran erección. Mientras buscaban, deben esconderse súbitamente, Black Cat y Doctor Octopus estaban en el sitio.
Por lo súbito de su escondite, Gwen terminó con la polla oscura de Miles entre sus piernas. Black Cat empezó a darle una mamada a Octavius, mientras un pequeño pulpo empezaba a meter sus tentáculos sobre su vagina. No estaban muy atentos a su alrededor, así que Gwen aprovechó la situación y empezó a moverse para seguir frotando el miembro de Miles sobre su coño húmedo.
Rápidamente, el miembro de Miles empezó a cubrirse de líquido preseminal, que Gwen utilizó como lubricante para aumentar sus movimientos. Luego, ella hizo que el chico empezara a meter sus dedos en su ano mientras frotaba su coño hasta correrse sobre ella.
Al mismo tiempo, Octavius se corre sobre la cara de Black Cat mientras ella se corre por el pulpo. Aprovechando esa distracción, los dos huyen del sitio para seguir buscando al padre de Miles, aunque en su mente se cuestionaban si acaso se estaban enamorando del otro.
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