Lincoln y Ronnie Ann se habían casado, había sellado su compromiso con un beso pasional que demostraba su pasión. La chica estaba feliz, y le dice a su nuevo esposo que le tenía un regalo para esa noche.

De pronto, contemplamos a Ronnie Ann con su madre, su tía y sus primas, todas en su lencería más sensual. Ella aceptaba ahora era una Loud, pero Lincoln también tenía que hacerse a la idea de que era un Casagrande.

Por lo cual, Lincoln empieza a follar a Carlota, penetrando su culo mientras le daba unos buenos azotes. Algo que le encantaba a Ronnie Ann que sentía como su prima devoraba su vagina caliente.

Luego de eso, Ronnie Ann y su tía se ponen a hacerle una mamada mientras el jugaba con sus culos. Lincoln disfrutaba del espectáculo, dándose cuenta que fue Frida quien le enseñó a su esposa a dar una buena mamada.

Incluso la madre de Ronnie Ann estaba disfrutando como la esperma caliente de Lincoln salía de su vagina, comprendiendo porque su hija lo eligió. El amaba a su mujer, y le encantaba el sabor dulce de su coño, mucho mejor al de cualquiera de sus hermanas.

La mejor amiga de Ronnie Ann también llega a la habitación, vistiendo únicamente una delgada manta de cocina, para darle su regalo de compromiso a Lincoln y Ronnie Ann. Este fue, dejar al peliblanco aplastarla en la pared, para que la cogiera hasta llenar su útero con su semen caliente.

Después de tal orgía, el chico baja para descansar un momento, aunque ver el cuerpo desnudo de su cuñada en el sofá lo vuelve a poner duro como una roca. Resulta que Sam y Luna querían tener un hijo, y esperaban que Lincoln fuera el donante.

Por lo cual, lincoln toma las caderas de Sam y empieza a penetrarla hasta llenar su estrecha vagina con esencia con la cual embarazarla. Ronnie Ann ve esto, y se burla del harem de su esposo, y la forma en que deberá compartirlo con otras.