La Androide 18 estaba a la total merced de Majin Buu. El monstruo había adoptado una forma femenina, y usando la elasticidad de su lengua empezó a chupar los dulces pechos de la androide, logrando enrollar su lengua sobre sus pechos, y mordisqueando sus pezones.

La rubia le pide que pare, pero Buu solo se burla, metiendo los dedos en su vagina antes de bajar para chuparla ella misma, logrando penetrar hasta lo más profundo de ella hasta hacerla correr. 18 estaba cansada por su orgasmo, pero Buu no sacó su lengua.

De hecho, usó sus poderes para cubrirla desde adentro. Antes de darse cuenta, 18 fue absorbida por el monstruo Buu, teniendo control total sobre ella, y lo primero que Buu hizo fue apretar sus grandes tetas, exprimiendolas para saborear la dulce leche materna de la androide.

Majin Buu detestaba a los humanos, pero sentía admiración por sus mujeres, gustándole masturbarse en el cuerpo de una chica, metiendo los dedos dentro de sí y apretando sus senos hasta correrse.

En medio de su clímax, Buu recordó algo de su pasado, cuando se encontró por primera vez con una embarazada. Estaba curioso sobre qué era tener a un hijo creciendo en su vientre, por lo que decide viajar hasta su ser.

18, Bulma, Milk, Videl, todas estaban encerradas en él. Buu despierta a Bulma de una cachetada para que le explique cómo embarazarse, y bajo la amenaza de que Trunks moriría ella le revela la verdad, lo que desencadena un nuevo plan en el monstruo: embarazar a todas las mujeres de su interior.

Para esto, va a la habitación del tiempo para encontrarse con un desmayado Yamcha. El monstruo utiliza sus poderes para rebitalizarlo y poner su polla dura como piedra, él iba a ser el padre de sus hijos quiera o no.

Buu pone su vagina húmeda sobre su cara, y la hace chupar hasta que acaba en su cara, mientras él le hace un oral profundo hasta dejar su polla llena de su saliva. A continuación, se sienta sobre él, enterrando su polla en su vagina, logrando correrse a la primera.

Mientras, en su interior, Buu liberó y despertó a Milk para atarla con sus tentáculos. La mujer gritaba que la liberaran, pero el monstruo lo que hacía era usar sus tentáculos para apretar sus grandes senos y masturbar su vagina, así cuando Yamcha se corrió en ella, la carga caliente fue directamente a la ama de casa.

La primera mujer que quedaría preñada para tener al bebé que tanto deseaba Buu.