Danny Phantom – Pubertad Fantasma 2

Jazz está muerta de la curiosidad por saber si Sam logró tranquilizar a su hermano Danny. Su madre le había asegurado que estaba más tranquilo, pero ella no está del todo segura de si es así. Por eso se dirige hasta la habitación de su hermano y toca la puerta para preguntarle si puede pasar. Como no recibe una respuesta, decide no esperarla y pasa directamente, entonces se da cuenta que él no se encuentra allí. Su curiosidad aumenta, esta vez por saber a dónde ha ido a una hora tan tarde.

Después de recordar las palabras de su madre, Jazz se aterra al pensar que quizá su hermano ha salido a hacerle daño a alguien. Por eso se apresura en buscarlo, pero en un principio no tiene idea de por dónde empezar. No tiene ninguna forma de rastrear a un chico desaparecido, pero luego recuerda que sí que puede encontrar a un fantasma escondido. Así que corre a buscar las gafas que usan sus padres para cazarlos y se las coloca para detectar los residuos y la actividad fantasmal de la zona. Entonces son la herramienta ideal para obtener pistas de adónde se ha ido su hermano.

Después de girar las gafas, éstas le muestran una imagen que resalta la actividad fantasmal más reciente. Y logra ver el camino que siguió Danny al irse, por lo que lo sigue sigilosamente, con cada paso que da su curiosidad sigue aumentando. Cuando finalmente está cerca y las gafas localizan al objetivo, éstas comienzan a aclarar la imagen. Entonces se revela a Danny dentro del baño en forma fantasmabórica tocándose mientras observa a su madre duchándose.

Jazz queda completamente perpleja, no puede creer lo que está viendo, ella pensaba que Sam había satisfacido a su hermano. Pero al parecer no fue así, porque está allí en el baño haciéndose una paja observando a su propia madre. Ella está consciente que no es culpa de su hermano que esté haciendo cosas así, normalmente él no haría nada como eso. Pero sus impulsos son cada vez más incontrolables y él no está en sus cabales. Y en cuanto ve su enorme polla dura, se da cuenta que él realmente necesita atención especial para liberar esa cantidad de tensión.

En ese instante ella recuerda lo que su madre dijo de que si no liberaba esa carga se convertiría en un fantasma malvado. Está decidida a no permitir que le suceda algo así a su hermano, sabe que tendrá que ayudarlo de alguna manera u otra. Pero para ello, primero debe lograr que salga del baño. Así que toca la puerta llamando por Danny, y le dice que necesita hablar con él cuando salga. Su madre responde que Danny no está allí, así que debe estar en su habitación.

Danny se asusta, no queriendo que lo descubran así que corre rápidamente a su habitación para evitar que lo descubran. Jazz se disculpa con su madre, y se dirige a la habitación de su hermano con la seguridad de que eso lo tuvo que haber asustado. Cuando finalmente llega allí, toca la puerta para verificar que ya esté dentro. Danny sale molesto preguntándole qué quiere, pero ella rápidamente le dice que quiere hablar con él antes de que le cierre la puerta en la cara.

Él le dice que no tiene ganas de hablar y le dice que se vaya a meterse en sus asuntos, pero obviamente ella no se dará por vencida. Así que le confiesa que lo ha visto antes cuando estaba abajo, en ese momento él responde nervioso, inseguro de si realmente se está refiriendo a lo que piensa. Pero ella le reafirma que lo ha visto, y le pide que la deje entrar.

Ya dentro de la habitación, ambos se sientan en la cama de Danny y él le pregunta qué tanto ha visto. Ella honestamente le dice que ha visto demasiado, y aprovechando que está más calmado, le pregunta por qué lo ha hecho. Danny se siente muy confundido, y le confiesa que solo recuerda haber estado acostado pensando en sus cosas (su candente e intenso encuentro sexual con Sam). Y de un momento a otro, sin siquiera darse cuenta, estaba en el baño en su forma fantasma haciéndose una paja mientras veía a su madre.

Jazz tímidamente le pregunta por su encuentro con Sam, diciéndole que ella imaginaba que él había quedado satisfecho después de eso. Danny le dice que sí, que había sido incluso mejor wue en ocasiones anteriores, pero que aún así siente que de alguna manera nunca logra ser suficiente solo con ella. Su hermana intenta animarlo diciéndole que seguro habrá una manera de solucionar su problema.

Su hermana se queda pensando en lo mal que la está pasando él, al parecer el asunto está peor de lo que Sam, su madre y ella habían hablado. Danny no haría cosas así si no tuviera una buena razón, y realmente parece que la carga de ayudarlo no debe recaer toda en los hombros de Sam. No está segura que realmente sea suficiente para liberarlo por completo, y ella no puede quedarse cruzada de brazos mientras observa cómo su hermano sufre. Por eso se le ocurre una manera de ayudarlo.

Le pregunta si realmente ama a Sam, y él rápidamente le dice que sí. Entonces Jazz le sugiere que quizá necesite estar con alguien diferente para poder liberar todas sus tensiones y así poder controlarse luego. Danny está de acuerdo con la conclusión de su hermana, pero un poco dudoso de si con eso bastaría. Jazz aprovecha para preguntarle si le gustaría que ella se hiciera cargo, ya que quiere ayudarlo con su problema.

Danny la observa escéptico, jamás se hubiera imaginado que su hermana le ofrecería algo así, y no está seguro de cómo responder. Jazz se pone un poco nerviosa al ver el rostro incrédulo de su hermano, por lo que rápidamente procede a decirle que no sería nada serio. Ella solo quiere ayudarlo a estar mejor porque no le gusta verlo sufrir ni quiere que haga cosas raras. Inmediatamente Danny suelta una carcajada, diciéndole que pensaba que estaban teniendo una conversación seria.

Él pensaba que su hermana estaba bromeando para sacarle una sonrisa y animarle. Luego procede a decirle que una santurrona y aburrida como ella no podría saber nada acerca de esos temas. Jazz se ofende altamente diciéndole que no es ninguna aburrida santurrona, ya que ella sabe hacer ese tipo de cosas. Como se siente retada, está decidida a demostrarle que se equivoca con sus prejuicios. Ella saca su polla y cuando la ve al descubierto se impresiona de lo grande que se ve de cerca.

Danny le dice que la broma ha ido demasiado lejos y que puede parar cuando quiera, pero Jazz es muy orgullosa y piensa terminar lo que empezó. Y más sabiendo lo mucho que su hermano lo necesita, y como hermana mayor es su deber ayudarlo. Así que sin pensarlo más, se lleva la polla la boca y empieza a chuparla empapándola con su abundante saliva. Danny gime por lo bien que lo hace su hermana, sin poder creer que ella realmente se haya atrevido a hacer eso.

Jazz pasa ágilmente su lengua por la punta de su polla para luego metérsela hasta el fondo de su garganta. Está decidida a darle mucho placer a su hermano, y para ello se esmera por darle la mejor mamada de su vida. Después de un buen rato chupándosela, ella decide quitarse la camiseta; haciéndole saber que va muy en serio con su plan de ayudarlo en todo lo que quiera. Él le recuerda que es su hermana, y que no es correcto loq ue hacen, pero Jazz le dice que lo vea como un tratamiento, y ella es la encargada de dárselo.

Sin esperar otra respuesta de su hermano, Jazz procede a masturbarlo con sus grandes tetas, esforzándose mucho por lograr que disfrute el momento. Sin embargo quiere hacer más para asegurarse que realmente lo satisfaga de verdad, por eso también usa su lengua para chupar lamer la punta cada vez que su polla sube entre sus tetas. Danny no puede aguantar ante tanto placer y acaba disparándole una gran carga de semen en toda su cara. Ella siente lo caliente y espesa que está, sorprendida de lo abundante que es a pesar de que no hace mucho había tenido sexo con su novia Sam.

Ella le exige que le dé un pañuelo para poder limpiarse toda su cara, él nerviosamente busca entre sus pañuelitos y le entrega la caja a su hermana. Jazz limpia su cara
sintiéndose sucia por haber hecho algo así con su hermanito, espera que mínimo haya servido para ayudarlo a satisfacer sus intensas necesidades. Pero justo en ese instante se da cuenta que el chico sigue con una dura erección. No puede disimular su gran asombro, parece que su hermano se ha convertido en un chico totalmente insaciable.

Danny se disculpa por seguir durísimo después de todo el esfuerzo que hizo su hermana para tranquilizarlo. Le dice que si no quiere seguir entenderá su decisión, ya él buscará otra manera de calmarse. Jazz reflexiona sobre qué hacer, solo sabe que no puede dejar a su hermano así ya que podría hacer alguna locura como la que había hecho en el baño. Por eso finalmente decide seguir con lo que ya ha iniciado y se desnuda por completo, diciéndole a Danny que ha dicho que lo ayudaría y que eso hará.

Él no puede creer que su hermana esté dispuesta a llegar tan lejos para ayudarlo, pero en definitiva Jazz está muy decidida a llegar hasta el final. Por eso sin siquiera flequear, ella se sube sobre su polla y empieza a frotar su coño empapado hasta que su polla queda totalmente mojada. Cuando ya su pene está preparado, ella le pregunta si está listo para lo siguiente, y procede a sentarse por completo sobre él. Jazz comienza a saltar fuertemente sobre su polla, sintiendo lo grande y dura que se siente en su interior.

Danny disfruta de lo apretada que está su hermana, y aunque ella también está disfrutando del sexo, está empezando a cansarse. No puede creer que él aguante tanto, cuando ella está por morirse. Danny le anuncia que si sigue con ese ritmo, logrará que el se corra; eso solo sirve como incentivo para Jazz, que empieza a montarlo con mucha más fuerza. Sintiendo todo el éxtasis recorrer sus cuerpos, ambos tienen un fuerte orgasmo al mismo tiempo que logra que sus fluídos se entremezclen.

Jazz queda completamente agotada, jamás había montado una polla por tanto tiempo. Pero Danny quiere más, no está preparado para recibir un no. Por eso su lado oscuro ataca y le grita a su hermana que no puede dejarlo así, y en cuanto ella se descuida, Danny la toma y la penetra sin previo aviso. Ella insiste en que no puede más porque está muy cansada, pero para ese punto Danny está cegado por el deseo. Él la empotra tan fuerte, que no tarda mucho en acabar dentro del coño de su hermana. Su vagina está muy sensible y ella siente todo con mucha intensidad.

Después de tranquilizarse, Danny le pregunta si ha disfrutado, pero el orgullo de Jazz la hace negarlo rotundamente. Ella le dice que solo lo ha hecho para ayudarlo, y que no hay manera de que él pueda satisfacerla. Él se toma eso como un reto, y le dice que entonces no le molestará volverlo a hacer; ella no puede creer que él aún pueda continuar. Jazz intenta retractarse, pero Danny no espera más y vuelve a penetrarla.

La empotra fuertemente hasta que ambos se corren y quedan completamente satisfechos abrazados en la cama. Danny le confiesa a su hermana que ha estado increíble y que espera que pueda ayudarlo la próxima vez que necesite liberar tensión. Jazz acepta, decidida a ayudar a su hermano siempre que lo requiera.

Ninguno de los dos se imagina que detrás de la puerta está su madre que los ha pillado. Ella no puede creer que sus hijos hayan hecho algo así, y mucho menos que piensen repetirlo. Tendrá que hacer algo para impedirlo, a pesar de que haberlos visto le ha excitado lo suficiente como para hacerla mojar sus bragas.

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